La terapia de integración sensorial se ha consolidado como una de las estrategias más efectivas en la terapia infantil. Cada vez más centros de terapia ocupacional infantil están incorporando la terapia asistida con animales, específicamente con perros, debido a los amplios beneficios que presenta para los niños.
Introducción
En un centro de terapia ocupacional en integración sensorial, es común observar cómo los terapeutas ocupacionales aprovechan la relación entre los niños y los perros para mejorar diversos aspectos del desarrollo infantil. En estos espacios, también denominados centros de integración sensorial, los perros juegan un papel crucial que trasciende más allá de la simple compañía.
Relación entre Terapia Sensorial y Terapia Asistida con Animales
La integración sensorial es el proceso mediante el cual el cerebro organiza y responde adecuadamente a la información sensorial del entorno. Para muchos niños con trastornos del procesamiento sensorial, estos estímulos pueden ser abrumadores. Aquí es donde los perros entran en juego, facilitando una experiencia sensorial controlada y segura.
Beneficios Psico-emocionales
Uno de los principales beneficios de la terapia asistida con perros es la mejora en el bienestar emocional del niño. La interacción con el animal puede aumentar la producción de oxitocina, una hormona vinculada al afecto y la empatía. Esto ayuda a reducir los niveles de ansiedad y mejorar el estado de ánimo, facilitando así el trabajo del terapeuta sensorial.
Estímulo Multisensorial
La presencia de un perro en una sesión de terapia de integración sensorial ofrece una variedad de estímulos táctiles, visuales y auditivos. La textura del pelaje, los sonidos y los movimientos del perro proporcionan un entorno sensorial enriquecido que puede ser modulado por el terapeuta ocupacional según las necesidades del niño.
Fomento de Habilidades Motoras
Interacciones como acariciar, cepillar o incluso jugar con el perro en el centro de terapia ocupacional infantil pueden ayudar a mejorar las habilidades motoras gruesas y finas del niño. Estas actividades fomentan la coordinación, el equilibrio y la fuerza, habilidades esenciales para el desarrollo completo del niño.
Desarrollo del Lenguaje y las Habilidades Sociales
La terapia con perros también puede ser un catalizador para el desarrollo del lenguaje y las habilidades sociales. Los niños, especialmente aquellos con dificultades del habla, a menudo se sienten motivados a comunicarse mientras interactúan con el perro. Pedirle al perro que realice trucos, darle órdenes simples o describir sus acciones son actividades que pueden mejorar significativamente el lenguaje y las habilidades comunicativas.
Testimonios y Resultados
Numerosos centros de terapia ocupacional infantil, incluyendo centros de atención temprana como el Centro de Atención Temprana Coruña, han reportado resultados positivos utilizando perros en sus sesiones de terapia sensorial. Padres y terapeutas coinciden en que la inclusión de estos animales aporta una dimensión adicional que potencia el éxito de las terapias tradicionales.
Conclusión
Incorporar perros en la terapia de integración sensorial ofrece múltiples beneficios que van más allá de lo evidente. Los avances emocionales, físicos y cognitivos observados en niños bajo esta metodología demuestran el potencial transformador de la terapia con perros. Si buscas un enfoque integral para la terapia infantil, la combinación de la terapia asistida con animales y la integración sensorial puede ser una opción valiosa y efectiva para tu hijo.
Explorar las posibilidades que brinda un centro de terapia ocupacional con este tipo de intervenciones puede marcar una diferencia significativa en el desarrollo de tu hijo. No dudes en considerar todas las opciones disponibles para brindarles el mejor apoyo posible.